jueves, 15 de diciembre de 2011

Iguales ante la ley

La nación española está muy por encima de partidos políticos, ideologías o formas de estado. También lo está por encima de la monarquía. Isabel II tuvo que salir por patas después de la Gloriosa y hoy el desterrado es Iñaki Urdangarín, marido de la infanta Cristina. La verdad es que el Rey no ha tenido muy buena suerte con los yernos.

Todo el mundo tiene derecho a la presunción de inocencia hasta que no se demuestre lo contrario. Está claro. Dicho esto, al parecer hay indicios más que razonables de que el señor Urdangarín ha metido la mano en el cazo. La propia Casa Real ha dicho de él que no ha tenido un comportamiento “ejemplar”. La justicia tiene otra oportunidad de oro para demostrar al pueblo que está a la altura de las circunstancias. También la tiene con el Sr. Blanco y sus gasolineras. Y venga, vale, también con los tres trajes de Camps.

A mí me parece muy bien que el Rey se “divorcie” de su yerno, o que éste se levante mañana republicano, o que se le dé un toque de claridad y trasparencia a las reales cuentas, todo muy bien. Pero si Urdangarín la ha hecho, que la pague. Igual que Blanco, Bono, Chaves, Matas o Camps. Y si me apuran, ¡qué es eso de la inviolabilidad del Rey! Si quieren que creamos en esta democracia antes nos tienen que demostrar que todos somos iguales ante la ley, que ya va siendo hora. Tal y como reza en nuestra Carta Magna. El que fuera presidente de Israel de 2000 a 2007, Moshé Katzav, ha sido condenado a siete años de cárcel por abusos sexuales. Ya está en prisión. “El único estado estable es aquél en que todos los ciudadanos son iguales ante la ley”, lo dijo Aristóteles y su sentido común. Israel nos ha dado un ejemplo de ciudadanos iguales ante la ley, ¿lo somos en España? Pues empecemos por ahí.

*** Publicado en Estrella Digital el 14.12.2011
*** Publicado en La Tribuna de Albacete el 15.12.2011

No hay comentarios: